- Psicoterapia psicocorporal postreichiana -

Vegetoterapia   Caracteroanalítica

Este modelo terapéutico lo inicia     Wilhelm Reich (1897-1957) en la década de los años 30 en Berlín y en los países     nórdicos y seguirá evolucionando cuando vivió en Estados Unidos, aplicándolo     también en el tratamiento de los trastornos funcionales y degenerativos, en     combinación con otras herramientas médicas y energéticas por lo que le cambió     el nombre definiéndola como "orgonterapia".

Se trata de una terapia psicoanalítica     en la que se introduce el cuerpo, el sistema neuromuscular y neurovegetativo,     como medio terapéutico, facilitando la abreacción emocional a través de la     reactivación de las experiencias y recuerdos infantiles y la dinámica relacional     y transferencial. De esa manera la persona trabaja en el diván y en una atmósfera     que facilita la regresión terapéutica y la emergencia del inconsciente a través     de la palabra y de la expresión emocional.

Junto a la interpretación de     los sueños, actos fallidos y la transferencia se interpretan también las respuestas     corporales, los cambios vegetativos durante las sesiones, la forma de respirar,     de hablar y de moverse, realizando una elaboración somatopsíquica que le permite     a la persona un mayor conocimiento de sus mecanismos de defensa en forma de     actitudes caracteriales y musculares que Reich denominó Coraza y que limitan     y atrofian el desarrollo de las potencialidades corporales y psíquicas, produciendo     en el tiempo síntomas psicopatológicos y psicosomáticos, límites en la percepción,     reducción en la capacidad de placer, agresividad contenida, limitada gestión     de las pulsiones, insatisfacción existencial y vital, depresión, vacío, ansiedad.      

Se recuperará, a través de estos     medios terapéuticos, el equilibrio psíquico y emocional; la capacidad orgástica,     de placer, y de Autoestima y gestión de su vida teniendo en cuenta los límites     producidos por su realidad concreta, facilitando medios para su transformación.     Por los objetivos que tiene esta terapéutica, que ha sido sistematizada y     perfeccionada por diversos profesionales post-reichianos, en particular por     el neuropsiquiatra italiano F. Navarro, es bastante más larga que la P.B.C.,     tiene una duración aproximada (según la estructura del paciente) de 3 a 4     años realizando dos sesiones semanales de 45 minutos o una doble de hora y     media a la semana. Según el numero de sesiones (un mínimo de seis al mes),     la implicación y motivación de la persona, la empatía entre terapeuta y paciente     y la propia dinámica clínica tendrá una duración mayor o menor.

Es evidente, asímismo, que en     la consecución de estos objetivos, se viven dinámicas de crisis que permiten     que la persona se encuentre con su esencia y sus procesos nucleares siendo     a veces un pequeño viaje a través del propio infierno, pero en un transporte     suficientemente seguro como para atravesarlo con éxito. Esta Psicoterapia     Corporal se realiza en sesiones individuales y una vez pasada la fase inicial     se combina con sesiones de grupo de 2 años, donde unas 12 personas se encuentran     una vez al mes durante cuatro horas para llevar un proceso grupal siguiendo     una sistemática propia, combinando técnicas verbales y corporales del propio     modelo y de otros (sistémicos, psicodramáticos, grupo-análisis,….) abordándose     situaciones y conflictos personales vinculados a lo social siendo el grupo     el propio sistema terapéutico. La posibilidad real de comenzar este proceso     y la forma de realizarlo se indica después de realizar el diagnostico estructural     (D.I.D.E.)